La Hermandad de Montserrat ha planificado un ciclo de tres conferencias en relación con la convocatoria del Año de la Fe, que se desarrollará en su sede canónica.
La primera lleva por nombre “Una Fe afianzada en la Palabra”, y estará a cargo de Sor Mª Dolores Ruiz Pérez F. M. A., salesiana, Doctora en Teología Bíblica y profesora del Centro de Estudios Teológicos y de la Escuela de Teología para Seglares de Sevilla. La fecha de la misma será la del viernes 30 de noviembre, a las puertas del próximo Adviento.
El objetivo es saber dar cuenta de nuestra Fe como muestra de la confianza en el Señor, que se manifiesta en el cumplimiento de su Palabra y en su encarnación en Jesús de Nazaret. El nombre hace referencia al lema de la JMJ del año pasado, "Firmes en la Fe", y a la advocación de la Virgen de Montserrat y la fortaleza de la roca de su montaña, que nos remiten al hombre del Evangelio que escucha la Palabra y la pone en práctica.
La segunda tendrá por nombre “Una Fe que nos conduce a la Conversión”, y la pronunciará el P. Celestino Fernández C. M., padre paúl que hablará de las actitudes y virtudes evangélicas que están en la base de la vida de San Vicente de Paúl y que cuadran perfectamente con la advocación del Cristo de la Conversión, como el convencimiento sincero de la dignidad del pobre, la "conversión" hacia los pobres, leer el Evangelio y la vida con los ojos de los pobres, y la audacia y la creatividad a la hora de vivir conforme al Evangelio. La fecha prevista para esta conferencia será en torno a la Cuaresma de 2013.
Y por último, durante la Pascua de 2013 tendrá lugar la tercera conferencia, cuyo nombre será “Una Fe que, mediante la Esperanza, nos obliga a la Justicia”, con ponente todavía por confirmar. El ciclo se ha planteado como un itinerario a seguir a la hora de interiorizar y saber explicar la vivencia de nuestra Fe, desde la Fortaleza que la sostiene en los momentos de dificultad confiados en la Palabra del Señor, pasando por la Misericordia y el Amor que brotan de la Conversión al Evangelio, hasta el impulso para hacer presente el rostro del Señor en la sociedad, cooperando a la venida de la Justicia del Reino de Dios y sabiendo dar razón de nuestra Esperanza, y así poder dar testimonio y responder como cristianos en nuestra vida cotidiana, en la familia y en la educación, en las entidades e instituciones con las que colaboremos y a las que pertenezcamos, y como profesionales, trabajadores, empresarios, consumidores, o meros ciudadanos.
Noticia Extraida de: http://www.pasionensevilla.tv/index.php?option=com_content&view=article&id=20431&Itemid=182
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